Todos podemos esconder un escritor o escritora dentro. Sólo necesitamos creer que vamos a ser capaces de hacerlo y, claro, dedicarle esfuerzo y tiempo. ¿Os apetece que otras personas puedan leer lo que vosotros escribís? Venga, animaros, los que me gusten, me comprometo a incluirlos en este blog.
Una petición: los blog como éste se leen mejor cuando tienen textos cortos. Así que os propongo todo un reto: contar un cuento corto, que se pueda leer en unos... 2 minutos, por ejemplo (o bueno no más de 20 líneas). Que sí, que es posible, y os escribo uno para que lo comprobéis (no es el mejor del mundo, pero me sirvió para arrancar una sonrisa a mi hija de 10 años hace dos noches):
"Esto era una libélula que se llamana Estrella. A Estrella le gustaban tanto las estrellas que en lugar de volar de día, como cualquier libélula, ella volaba de noche. Y para verlas bien volaba hacia arriba, hacia arriba... Total, que tan pendiente estaba Estrella de las estrellas que al final SE ESTRELLÓ. ¡Vaya torta se dió la pobre! Se golpeó con una rama (crac), se golpeó con una lata (clanc), con una piedra (pom)
Desde ese día, Estrella ya no es sólo Estrella, es ESTRELLA-DA. Qué contenta está, le ha crecido el nombre."